Y Forman una fábrica de mendigos dependientes; ahí tenemos dos clases de religiosos usando a la Iglesia, solo para servirse y no para servir.
La Iglesia tiene que vivir (mantenerse) de ofertas y contribuciones voluntarias.
Paulo habla en 2º Co 9:
7- Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ó por necesidad; porque Dios ama el dador alegre.
Jesús habla en: Mateo 5. 23-24.
23- Por tanto, si trajeres tu presente al altar, y allí te acordares de que tu hermano tiene algo contra ti,
24- Deja allí tu presente delante del altar, y vete, vuelve primero en amistad con tu hermano, y entonces ven y ofrece tu presente.
Y si tu estas en falta con tu hermano, tu oferta no es aceptada por Dios.
¿Será que Dios va a aceptar de otra |
manera, venido de comercio, juegos, fiestas de caridad?
Fue por esto la única vez que Jesús se puso furiosos y expulso a los que vendían y compraban animales para el sacrificio en el patio del templo, diciendo que la casa de mi padre es casa de oración, no casa de negocio, madriguera de asaltantes.
¿Cómo llamaría Jesús a estos religiosos de hoy? ¿Y todavía usan el nombre de cristianos con todo este comercio?
La farsa del diezmo
Y esos dos movimientos carismáticos, prosperidad que quieren vivir el paraíso aquí, aplican el diezmo, que era la herencia de los desheredados levitas de Israel. Esos mercenarios aplican el diezmo al pueblo cristiano (gentiles), no habiendo ningún versículo en el nuevo testamento para justificar. Toman a Malaquías (Viejo Testamento). ¿Por qué no toman la ley, Deuteronomio l4. 22 a 29? |