(cada uno tiene la religión que quiere, la Iglesia que le conviene y el Dios que merece, como el niño con papá Noel- ¡engáñame que me gusta!).
12- Para que sean condenados todos los que no creyeron á la verdad, antes consintieron á la iniquidad.   
Daniel 12. 1 a 13. Habla que habrá tiempo de angustia en Israel como nunca hubo, más que la destrucción de Jerusalén y el Templo, en el año 70, y en el holocausto de la 2ª Guerra mundial.
   Que en la angustia buscaron y lloraron, por Jesús, el Cristo que rechazaron y mataron, como profetiza Zacarías: 12:
10- Y derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia y de oración; y mirarán á mí, á quien traspasaron, y harán llanto sobre él, como llanto sobre unigénito, afligiéndose sobre él como quien se aflige sobre primogénito.
11- En aquel día habrá gran llanto en Jerusalém...

    Es en ese tiempo que se cumplirá la 5ª visión de Zacarías: 4 - Del candelabro de oro (aceptaran a Jesús y a su Iglesia).
 Jesús también profetiza en: Lucas. 13:
35- He aquí, os es dejada vuestra casa desierta: y os digo que no me veréis hasta que venga tiempo cuando digáis: Bendito el que viene en nombre del Señor.
     En este tiempo, muchos de los judíos se convencerán de que Jesús vino; para substituir a la ley: ojo por ojo, diente por diente; por el amor al prójimo; el templo; por la Iglesia, Jesús en la purificación del templo, los judíos querían una señal.  Juan. 2:  19- Respondió Jesús, y díjoles: Destruid este templo, y en tres días lo levantaré.
20- Dijeron luego los judíos: En cuarenta y seis años fue este templo edificado, ¿y tú en tres días lo levantarás?
21-  Mas él hablaba del templo de su cuerpo. (Cuerpo y la Iglesia, donde El es la cabeza, y nosotros sus miembros).